sábado, 4 de agosto de 2012

LA ANGUSTIA DESPUES DE UN INFARTO,mayoclinic

La angustia, la ansiedad y el miedo son frecuentes después de un ataque cardíaco

Luego de sufrir un ataque cardíaco, muchas personas sienten depresión y presentan otros síntomas asociados a lo que se conoce como síndrome postraumático, que incluye ansiedad y pesadillas. Ahora, un nuevo estudio ha detectado que esto sucede con más frecuencia de lo que se cree y que, incluso, puede aumentar el riesgo de que la persona vuelva a tener un infarto en el futuro.
Los primeros meses luego del infarto fueron los peores para Raquel. Por un lado, sentía que había renacido luego de una situación tan riesgosa, pero no podía evitar sentir tristeza por lo que le había ocurrido. También la perturbaban tanto todos los cuidados y cambios de hábitos que tendría que tener a partir de ahora para evitar una recurrencia que comenzó a soñar continuamente con situaciones de emergencia, se angustiaba muy seguido, comenzaba a llorar sin razón aparente y se le ponían los pelos de punta.
La depresión es frecuente en las personas que sufren un infarto o ataque cardíaco. También es común que quienes han pasado por esta situación experimenten señales de lo que se denomina trastorno o síndrome de estrés postraumático (TEPT), como miedo, ansiedad, pesadillas o recordar continuamente escenas o imágenes traumáticas, lo que además puede aumentar la presión arterial y/o el ritmo cardíaco.
Un infarto se produce cuando, por algún motivo, la sangre no puede llegar al corazón (o a una parte del corazón). Puede ser porque uno o más vasos sanguíneos se encuentran obstruidos (tapados). Al no recibir la sangre que necesita, el corazón se daña.
Si el infarto es muy severo puede provocar un paro cardíaco, es decir, puede hacer que el corazón deje de latir, lo que también le produce una lesión a este músculo y puede llevar a la muerte. Por eso, ambas situaciones, la de un infarto y la de un paro cardíaco, son muy riesgosas y pueden resultar traumáticas para quienes las sufren.
El síndrome por estrés postraumático es un grupo de síntomas angustiantes que se manifiestan después de un incidente aterrador, ya sea porque la persona lo experimentó directamente o fue testigo de una situación que ha incluido una lesión física seria o una amenaza de lesión o muerte, como un accidente automovilístico o en el trabajo, robos o asaltos callejeros y estar presente durante tornados, terremotos u otros desastres naturales.
Un nuevo estudio que aparece publicado en la edición en línea del 20 de junio de la revista especializada PLoS ONE -que ha sido financiado por los Institutos Nacionales de Salud de Los Estados Unidos- brinda nuevos datos sobre la relación entre el infarto y los síntomas del trastorno o síndrome de estrés postraumático (TEPT).
Según encontraron los investigadores, se estima que uno de cada ocho supervivientes de un infarto experimenta señales del TEPT y que el desarrollo de esos síntomas duplica el riesgo de que los pacientes cardiacos sufran un segundo infarto o mueran en un plazo de tres años.
Para llegar a tales hallazgos, los investigadores consideraron los resultados de 24 estudios publicados de casi 2.400 pacientes cardiacos. Encontraron que el 12 por ciento de los pacientes mostró síntomas significativos del trastorno o síndrome de estrés postraumático (TEPT) y alrededor del 4 por ciento cumplía con los criterios para un diagnóstico completo del TEPT (considerando que los síntomas deben durar por lo menos un mes tras el evento, antes de que se pueda hacer un diagnóstico del TEPT)
Además, tres estudios que siguieron a más de 600 pacientes con TEPT tras un ataque cardiaco mostraron que esos pacientes tenían casi el doble posibilidades de volver a sufrir otro ataque cardiaco o morir.
Estos hallazgos brindan nuevos datos para que los profesionales de la salud puedan ayudar a quienes sufren del síndrome del estrés postraumático. Algunas personas se recuperan solas luego de un infarto y se adaptan al tratamiento sin mayores complicaciones, pero a otras no les resulta tan fácil. Es en esos casos que se debe buscar ayuda profesional, para que recibir la terapia y el tratamiento necesarios para que el paciente pueda llevar de nuevo una vida sin miedo y sin angustia.

CUANDO SE DEBE INDUCIR LE PARTO,mayoclinic

¿Cuándo se debe inducir el parto?

La naturaleza es sabia y actúa con un tiempo perfecto. Sin embargo, en ocasiones, cuando tu embarazo pasa de las 40 semanas o existe alguna otra condición que requiera atención especializada, es probable que tu médico sugiera inducir el parto para proteger tu salud y la de tu bebé. De lo contrario, es mejor esperar a que el trabajo de parto empiece de manera natural porque forzarlo cuando no es necesario, también puede implicar riesgos para ti y tu bebé que viene en camino. Aquí te cuento más acerca de cuándo es común que se induzca el parto.

Como su nombre lo indica, inducir el parto significa provocarlo de manera artificial. Por lo general, la naturaleza hace bien su trabajo y tu cuerpo empieza el trabajo de parto en el momento indicado, es decir, cuando tu bebé ya está listo para nacer. No obstante, ocasionalmente algunos embarazos presentan algunas condiciones que no siguen los patrones normales y es entonces cuando el médico decide que es mejor inducir el parto para no comprometer tu salud y/o la de tu bebé. Estas son algunas de las razones por las que un obstetra podría decidir que lo mejor es inducir el parto:
  • Cuando tu embarazo lleva 42 semanas de gestación puesto que hay más riesgo de complicaciones: la placenta podría estar disminuyendo su habilidad de mantener el embarazo y quizá no pueda seguir alimentando y nutriendo bien a tu bebé. También sería posible que tu bebé defecara por primera vez estando adentro (el meconio) y sus vías respiratorias se bloquearan causando complicaciones importantes.
  • Cuando algún estudio demuestra que tu bebé ha dejado de crecer al ritmo normal y se ha descubierto que su ritmo cardíaco es anormal.
  • Cuando se rompe el agua (“se rompe la fuente”) y no tienes ninguna contracción de forma natural. Entonces, tú y tu bebé tienen un mayor riesgo de sufrir una infección.
  • Cuando no hay suficiente líquido amniótico rodeando a tu bebé.
  • Cuando tienes alguna condición médica como hipertensión o presión alta (pre-eclampsia), diabetes gestacional, infección en el útero o sangrado vaginal que comprometa tu salud y la de tu bebé.
  • Cuando la placenta se desprende de la pared uterina parcial o totalmente antes del parto (abrupción de la placenta).
Se han dado casos en los cuales son las mismas mujeres quienes quieren que les induzcan el parto, ya sea porque están cansadas o tienen miedo de que ocurra algo. No se recomienda inducir el parto por razones que no son estrictamente médicas. Por eso, por capricho, no te lo van a inducir pues esto también acarrea riesgos innecesarios para tu salud y la de tu bebé.
En el caso de que tu embarazo haya llegado a las 40 semanas y aún no presentes señales de iniciar el trabajo de parto, tu médico sugerirá esperar un poco para darle oportunidad a tu cuerpo de actuar. Cuando ya estás acercándote a tu fecha estimada de parto, el cérvix o el cuello del útero empieza a ablandarse para poder abrirse y darle paso a tu bebé. Existen algunas formas de ayudar a inducir el parto de forma natural como estimular los pezones y tener sexo, aunque esto último no ha sido comprobado científicamente. Masajear los pezones se dice que es efectivo solamente una vez que el cuello del útero está más blando y ya ha empezado a dilatarse.
De todas maneras, si pasas las 40 semanas y tu médico está preocupado por tu salud y la de tu bebé al no ver ninguna señal de parto, inducirlo puede ser la mejor opción. Pasadas las 40 semanas tu bebé está ya grande y es posible que su tamaño complique un parto vaginal normal. Así mismo, puede que durante el parto inhale meconio (la primera defecación) y desarrolle una infección en los pulmones y las vías respiratorias que puede ser grave.
¿Cómo se induce el parto?
Antes de tomar la decisión de inducir, el médico evaluará la condición de tu cérvix o cuello uterino para ver si ya está dilatándose o si ya ha alcanzado lo que se conoce como madurez cervical. Mediante una prueba llamada Test de Bishop se evalúa si las posibilidades de parto espontáneo son elevadas. Si la puntuación en esta prueba es baja, el médico te administrará medicamentos para ayudar a la maduración del cérvix antes de inducir el parto. Otras técnicas que se usan para inducir el parto son la ruptura de las membranas, la maduración artificial del cuello uterino con prostaglandinas (unos medicamentos para ayudar a madurar el cuello), la ruptura del agua o de la fuente cuando el cérvix está parcialmente dilatado (en ese caso se debe dar a luz en un período no superior a 24 horas para evitar complicaciones), el provocar las contracciones mediante un medicamento llamado Pitocín (oxitocina). Si no empiezas el trabajo de parto con estas técnicas, entonces será necesario hacerte una cesárea.
Las complicaciones de inducir el parto podrían incluir:
  • Necesidad de practicar una cesárea, especialmente si no has dado a luz antes y si tu cuello uterino no se ha empezado a suavizar y a dilatar.
  • Parto prematuro: inducir el parto puede resultar en un parto prematuro para el bebé lo cual, por razones obvias acarrea complicaciones de salud para el bebé como dificultades respiratorias.
  • Disminución de los latidos del corazón del bebé debido al uso de medicamentos como Pitocín o prostaglandina, los cuales pueden provocar demasiadas contracciones que afectan el flujo de oxígeno que llega al bebé.
  • La inducción del parto aumenta el riesgo de infección para la mamá y el bebé.
  • Problemas con el cordón umbilical (como que salga por la vagina antes del alumbramiento).
  • Ruptura del útero, la cual ocurre rara vez pero puede ser complicada. Sucede cuando el útero se rompe por la línea de cicatriz de una cesárea anterior.
  • Sangrado luego del parto puesto que al inducirlo, los músculos uterinos pueden tener dificultad para contraerse de manera apropiada luego del nacimiento del bebé.
Por todas estas razones, es muy importante que la decisión de inducir el parto sea porque el beneficio de inducirlo supera los riesgos de no hacerlo. Si tienes cualquier duda, consulta con tu médico. Recuerda que tu salud y la de tu bebé son lo más importante.

EL SACANNER DE LA INTELIGENCIA,,BBC

Cerca del diez por ciento de las diferencias en inteligencia entre unas personas y otras se debe a las conexiones entre las neuronas del córtex prefrontal lateral y el resto del cerebro, según revela una investigación que se publica en la revista Journal of Neuroscience. Los investigadores han analizado la inteligencia de varios individuos realizando escáneres de sus cerebros mientras llevaban a cabo diversas actividades.

Estudios anteriores habían demostrado que la actividad del córtex prefrontal lateral puede explicar hasta el cinco por ciento de las diferencias individuales en inteligencia. Ahora, el nuevo trabajo demuestra que las conexiones de esta área con otras también son muy importantes. "El estudio sugiere que para ser inteligente se necesita, por un lado, un córtex prefrontal lateral que haga bien su trabajo y por otro, que se comunique efectivamente con el resto del cerebro", informa Todd Braver, uno de los autores.

Los investigadores, de la Universidad de Washington en St. Louis, obtuvieron imágenes por resonancia magnética del cerebro de varios voluntarios mientras descansaban o realizaban actividades mentales complejas. Según explican en su trabajo, mientras que otras regiones del cerebro hacen su propia contribución a los procesos cognitivos, el córtex prefrontal lateral ayuda a coordinar estos procesos y a mantener la atención sobre la actividad que se está ejecutando.
Aunque todavía queda mucho por saber sobre la función de estas conexiones entre neuronas, los resultados de esta investigación podrían tener importantes implicaciones para la futura comprensión de la inteligencia humana.